lunes, 16 de agosto de 2010

RIESGOS


No se puede ir por la vida sin tomar riesgos. Yo, en el taller, siempre hablo de la posición de las manos: si uno va por la vida con las manos cerradas, no se corre el riesgo de que nada se escape. En cambio, si uno está con las manos abiertas, en posición de dar, también recibe. Y recibe de todo, se arriesga a recibir algo malo, pero esa misma posición (o disposición) de dar nos lleva a recibir mucho bueno.
Por lo tanto, arriéguense, la vida es riesgo. Piensen que no sabemos si vamos a estar vivos mañana:
"Reír es arriesgarse a parecer tonto.
Llorar es arriesgarse a parecer sentimental.
Pretender a alguien es arriesgarse a comprometerse.
Expresar sentimientos es arriesgarse a ser rechazado.
Exponer tus sueños frente a las multitudes es arriesgarse a hacer el ridículo.
Amar es arriesgarse a no ser correspondido.
Adelantarse en presencia de adversidades es arriesgarse a fallar.
Pero los riesgos deben ser tomados, porque el más grande de los peligros en la vida es el no arriesgarse a nada.
La persona que no arriesga nada, no hace nada, no tiene nada... es nada.
Debe evitar sufrir y penar, pero no puede aprender, sentir, cambiar, crecer o amar.
Es un esclavo de sus incertidumbres.
Sólo la persona que toma riesgos ...es libre".
Vivan cada día como si fuera el último.
Cariños y sonrisas
Irene

1 comentario:

  1. Hola Irene
    Tus escritos me parecen asertivos, me confrontan y animan a seguir, este en especial me agrado bastante

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Gracias por tu comentario.
Todo me alienta para seguir buscando y compartiendo artículos que nos hagan sentir mejor y con mayor bienestar psicológico.
Cariños y sonrisas