lunes, 31 de mayo de 2010

La felicidad escondida

Para escribirles hoy, nos gustó esta frase "Uno es tan feliz como uno mismo se ha propuesto a serlo".
Y esto nos hizo acordar de un cuento que conocemos hace muchos años, por lo que lo buscamos para poder compartirlo.
Ahí va!!!


Un poco antes que la humanidad existiera, se reunieron varios duendes para hacer travesuras.
Uno de ellos dijo:
-Debemos quitarle algo a los seres humanos, pero ¿que?
Después de mucho pensar, uno dijo:
-¡Ya Sé! Vamos a quitarles la felicidad. El problema es dónde esconderla para que no puedan encontrarla.
Propuso el primero:
-Vamos a esconderla en la cima de la montaña más alta del mundo
-No, recuerda que tienen fuerza; alguno podrá subir y encontrarla, y si la encuentra uno, ya todos sabrán donde está- Replicó otro.
Se escuchó una nueva propuesta:
-Entonces vamos a ponerla en el fondo del mar.
Otro señaló:
-No, no olvides que son curiosos, alguno podría construir un aparato para bajar y entonces la encontrarán.
-Escondámosla en un planeta bien lejano de la Tierra -Propone otro.
-No- Le dijeron. Recuerda que le dieron inteligencia, y un día alguno va a construir una nave para viajar a otro planeta y la va a descubrir, y entonces todos tendrán felicidad.
El duende más veterano, que había permanecido en silencio escuchando atentamente cada una de las propuestas, dijo:
-Creo saber donde ponerla para que nunca la encuentren.
Todos miraron asombrados y preguntaron al unísono: -¿Donde?
-La esconderemos dentro de ellos mismos; estarán tan ocupados buscándola fuera que nunca la encontrarán.
Todos estuvieron de acuerdo, y desde entonces ha sido así; el hombre se pasa la vida buscando la felicidad sin saber que la lleva consigo.
Hasta la próxima!!!!
Muchos cariños y sonrisas









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sábado, 29 de mayo de 2010

Entrevista a Alex Rovira

Nos pareció sumemente interesante, sobre todo pensando que es un economista!!! es un poco larga, pero es para saborearla, palabra a palabra. Leánla y nos van a dar la razón.
Alex Rovira nació en 1969 en Barcelona. Es economista, como ya dijimos, aunque es mucho más conocido como colaborador en distintos medios de comunicación y como autor de libros de autoayuda que han dado la vuelta al mundo: La buena suerte, La brújula interior, Los siete poderes o La buena vida.
Acontinuación¿Cómo un economista se convierte en un guía espiritual?
No creo en las etiquetas, contesta tajante, pero con suma educación.
Las personas somos mucho más que economistas o periodistas. Somos seres y como ser desde siempre me he interesado por las preguntas esenciales de todo ser humano: ¿Quién soy y para qué he nacido? ¿Qué es el amor? ¿Por qué morimos? ¿A dónde vamos cuando morimos?…
También sufría mucho por el dolor ajeno y me planteaba cuales eran los mecanismos que funcionaban en una persona para ser buena o mala”. Y así fui haciendo acopio de libros de psicología, literatura y filosofía, hasta que un día decidí ponerme a escribir de forma muy simple aquello que había entendido e integrado de la aventura que es vivir.
En tus libros dices que muchas veces el ser humano se encuentra en callejones cerrados por no haber revisado su sistema de creencias.
¿Cómo salimos de esos callejones
?
Lo más urgente es cambiar nuestro sistema de creencias que, por supuesto, es cultural e inconsciente. Algunas de estas creencias son “tengo que ganarme la vida”, “el mudo es escasez y frustración”, “el otro es un enemigo peligroso que compite para quitarme mis cosas”, “si soy feliz, la vida me pasará factura”… Todos estos pensamientos están grabados a fuego en nuestro interior y nos van matando poco a poco… En concreto, si pensamos que tenemos que ganarnos la vida, damos por hecho que la vida está perdida, cuando es todo lo contrario: la vida está ganada desde que nacemos.
Y si ahondamos en las demás, veremos que también son mentira, ¿no?
Efectivamente. El mundo es abundancia y está lleno de oportunidades,el otro, lejos de un competidor, es un co-creador y no hay que pagar ninguna factura por ser feliz, porque las mejores cosas que tiene la vida, si te das cuenta, son gratis.
¿Cómo desmontamos esas creencias inconscientes?
Los muros del laberinto de nuestras creencias se construyen desde el miedo y para desmontarlos hemos de pasar primero por el infierno. Hemos de enfrentarnos a todos nuestros demonios y ser valientes. Las paredes de esos callejones se desmoronan con coraje. Para ello necesitamos propósito, humildad, confianza y amor.
En mi opinión la crisis que estamos viviendo ahora mismo, mucho más que económica, es psicológica, es una crisis de confianza. Esta crisis nos está llevando a cambiar.
¿Cambiar en qué sentido?
La vida es una actitud. La vida es lo que hagamos de ella. Podemos elegir en cada momento nuestra actitud. Los cambios en la vida llegan a través de dos vías: por convicción o por compulsión. Hay pocos que cambian por convicción. Los que lo hacen entienden que vivir es estar al servicio de los demás y la causa de su cambio es ellos mismos, desde su ser.
Quienes cambian por convicciónlo hacen desde el amor, como te decía antes, con propósito, coraje y mucha fe. Pero la mayoría de la gente cambia por compulsión, desde la inconsciencia. Son los que piensan que el crecimiento ilimitado es sostenible, que pueden estrujar a la madre Tierra como si no tuviera alma y viven, como diría Erich Fromm en “el Tener en lugar de vivir en el Ser”. La crisis viene a enseñarnos que debemos ser conscientes.
¿Cómo nos hacemos conscientes?
Conociéndonos. Es urgente que dejemos de jugar al escondite con nuestro verdadero yo y nos atrevamos de una vez a realizar nuestros sueños. Pero para eso debemos tomarnos un tiempo para saber lo que realmente queremos.
Hemos de tomar conciencia de nosotros mismos para saber quiénes somos y para qué hemos nacido.
¿Cuáles son en tu opinión las vías para esto?
Reflexión, meditación, contemplación y por supuesto, cuestionarnos. Es vital que dejemos de autoengañarnos. Debemos decirnos la verdad en todos nuestros aspectos vitales. Muchas veces nos autoengañamos para no tener que tomar decisiones.
Así por ejemplo, nos decimos que tenemos un buen trabajo porque nos queremos renunciar a un buen sueldo. Pero no nos damos cuenta de que estamos pagando un sueldo muy alto por nuestro trabajo: andamos todo el día agotados, no tenemos tiempo para otra cosa que no sea trabajar, nos estamos perdiendo la infancia de nuestros hijos… Si nos dijéramos la verdad: no me gusta mi trabajo pero lo mantengo por el sueldo, podríamos llegar a ver la posibilidad de mejorarlo o de buscar algo más satisfactorio que nos permita igualmente vivir bien. Lo mismo ocurre con las relaciones de pareja y otras muchas otras facetas vitales. Ver la verdad nos libera y nos lleva en todo caso a mejorar todos los aspectos de nuestra vida.
Estoy de acuerdo con todo lo que expones en tus libros: desmontar creencias, buscarse, pensamiento positivo, crear nuevas circunstancias, visualizar lo que quieres… Pero me gustaría saber si tienes en cuenta al saboteador que todos llevamos dentro. ¿Qué hacemos con esa parte de nosotros que no nos permite llegar a donde queremos?
Al saboteador hay que mirarle a los ojos y negociar con él. Es vital que ahondemos en nuestros miedos y los enfrentemos. El mayor miedo del ser humano no es a sufrir es a ser quien realmente es. Muchas personas renuncian a sus sueños por un sentimiento de no merecimiento, de no valía, culpa o pereza. Hay que apartarse del camino del miedo y tomar el del amor.
¿Cómo?
Planteándonos: ¿Qué amo? Y poniendo, como decía Antoine de Saint Exupery, nuestra inteligencia al servicio de aquello que nos apasiona. Para ello debemos tomarnos tiempo para descubrir lo que nos gusta hacer, con qué somos felices y desarrollar nuestra maestría a través de ello.
Para ello es fundamental que nos permitamos experimentar. La vida es una aventura. Conocernos pasa por experimentarnos en todas nuestras posibilidades. Profundizar, estudiar, practicar, ensayar y equivocarnos. En resumidas cuentas hay que hacer. Pensamiento sin acción sólo es fantasía.
Pero lo más importante no es conseguir aquello con lo que soñamos, sino el aprendizaje y la transformación que alcanzamos en el camino hacia nuestros sueños. El mejor arquero del mundo, cuenta la leyenda apuntaba a la luna.
Cuando hemos llegado a nuestra maestría, ¿qué hemos de hacer?
Poner esa conciencia al servicio de los demás. No nos llevamos nada de esta vida excepto lo que hemos dado. Brian Weiss precisamente dice que “sólo el amor es real”. El amor es el valor que hace que todo crezca.Y amar es cuidar. Cuando somos quienes realmente somos, estamos en el amor y eso hace que se diluyan las fronteras del yo y entremos en sincronía con el Universo.”

viernes, 28 de mayo de 2010

Qué es la Felicidad?

Hoy leí un artículo que me gustaría compartir con ustedes:
Ahí va:
¿Cuando digo que es ser feliz?, que es lo primero que se nos cruza por la mente?, un viaje, una salida con amigos, la familia, tu pareja, tener un auto nuevo, una casa…..
Alguna vez nos detuvimos a pensar ¿que es la felicidad?
¿Que cosas son las que nos ponen feliz?
¿Como se genera la felicidad?
¿Qué puede estar faltando para ser completamente Felices?
¿En todo momento nos sentimos felices?
¿Es momentánea la felicidad?
¿De quien depende?
Quizás no querramos llegar a esperar hasta el final para darnos cuenta que para sacarle más el jugo a la vida y ser más feliz no es necesario que cambie el entorno o el mundo.

El mundo de por si ya es bien maravilloso.

Y para mi Somos nosotros los que podemos cambiar para darnos cuenta de sus maravillas, reconocerlas y disfrutarlas.

Yo creo que muchos piensan que el grado de su felicidad es la distancia entre lo que son las cosas realmente y lo que "deberían ser".
Y para vos como deberían ser?
Que estas haciendo vos para que eso suceda?
Solo la acción genera resultados.
Seriamos mucho mas felices si pudiéramos dejar de exigirle a la vida que las cosas sean "tan perfectas" para movernos en el reconocimiento de todo lo bueno que tenemos en lugar de enfocarnos en lo que nos falta.
Como dijo un gurú hindú a un discípulo que buscaba desesperadamente ser feliz: " te voy a decir el secreto. Si quieres ser feliz SE FELIZ!"
LA FELICIDAD ES UNA DECISION!
"LA MAYORIA DE LA GENTE ES TAN FELIZ COMO HA DECIDIDO SERLO!"
Abraham Lincoln

cariños u sonrisas y SEAN FELICES: SOLO HAY QUE TOMAR LA DECISIÓN

jueves, 27 de mayo de 2010

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Fenómeno felicidad!

Hoy, en el diario "Hoy.com.ec" de Quito, Ecuador ha salido un artículo que nos ha llamado la atención: Un equipo multidisciplinario, compuesto por un filósofo, un neuroquímico, un psicólogo, una socióloga y un periodista -investigadores del tema FELICIDAD en sus diferentes disciplinas- resumieron los resultados alcanzados:
* la condición primera de la felicidad parece estar relacionada con la satisfacción previa de las necesidades básicas: hambre, sed, sueño.
* Indispensable precondición es también la ausencia de un alrededor físico cruel
* la realización de una identidad personal, su yo, en relación con el rango social dentro de la familia, el grupo, la clase, la política, en dependencia con la actividad, profesión o preferencia cultural.
* la realización de obras buenas, altruistas, en favor de otros.
* Saber aprovechar el tiempo (carpe diem) porque sabemos que somos mortales y que nacemos para morir (el concepto de muerte está inserto en nuestro cerebro)
Y también dicen que el Estado con bienestar, el Estado industrial, no ha traído más felicidad, pero no ha causado mayor infelicidad.
Por lo tanto, sacando conclusiones, podemos decir que teniendo las necesidades básica cubiertas y viviendo en un ambiente que no sea especialmente cruel, lo que nos hace feliz es el reconocimiento dentro de la familia y del grupo con el cual convivimos, la realización dentro la actividad que realicemos, viviendo el presente con conciencia plena y realizando obras buenas por los demás.
Parece que la entrega a los demás es muy importante, para nuestro nivel de felicidad... por lo tanto, que les parece si lo ponemos en práctica y hoy realizamos la buena obra del día?
Cariños y hasta la próxima

lunes, 24 de mayo de 2010

Hoy vamos a escribir nosotras!!!

Después de unos cuantos meses, poniendo artículos muy interesantes de otras personas, hoy decidimos escribir nosotras nuestra propia versión de la felicidad.
no es que sea distinta de la que hemos venido publicando, pero hoy tendrá un sabor más "personal" y por lo tanto más coloquial!
Nosotros creemos que la felicidad es un concepto que incluye alegría, pero también otras muchas emociones, algunas de las cuales no son necesariamente positivas, como compromiso, lucha, reto, incluso dolor. Es una decisión de vida, es un camino, y como tal, implica el levantarse todos los días diciendo; - Hoy voy a ser feliz! ´
Cómo dicen los chinos: Las grandes almas tienen voluntades, las débiles sólo deseos!

Parafraseando a Mary Carmen Rumbo Quintal, decimos que hacen falta 4 virtudes pare ser feliz:
1) LA FÉ: Hablar de fé es entender la confianza en lo que se cree, que puede ser algo tangible o intangible, pero que se convierte en el sostén de la vida misma
2) LA PACIENCIA: implica ser tolerantes con la imperfección de nuestra condición de humanos. Quién es paciente sabe esperar los momentos óptimos de su vida pero también entiende las dificultades de esta forma humana que tenemos. Quién cultiva la paciencia aprende a vivir sus metas y no sólo a esperar resultados.
3) LA HUMILDAD: La virtud que conlleva el “Ser Humilde” es entender que somos un pequeño granito de arena en un espacio infinito, es saber que el mundo no gira en nuestro entorno. La humildad nos permite valorar la grandeza del trabajo ajeno tanto como el que ejercemos nosotros mismos. Humildad es aceptar que tu vida es parte de un todo pero no lo es todo en absoluto.
4) LA SABIDURÍA: su grandeza parte de reconocer lo poco que sabemos y lo mucho que ignoramos. El hombre sabio entiende que cada instante vivido es una oportunidad de aprender algo nuevo y vive la perfecta relación que existe entre: Conocimiento, Sentimiento, y Pensamiento, experiencia que le permite desarrollar la conciencia en su actuar cotidiano.

Realmente, estas 4 virtudes nos permiten entender que nuestra verdadera posición en el mundo: somo parte de ese todo formado por el universo total, pero a la vez somos únicos e irrepetibles, creados a imagen y semejanza del Creador.
Y cuando vivimos esta 4 virtudes, siendo personas de fe, pacientes, humildes y tratando ser más sabios cada día, seremos más felices!
Hasta la próxima, mandándoles muchos cariños y sonrisas!

viernes, 21 de mayo de 2010






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5 caminos confiables a la felicidad

Algunas de las universidades más prestigiosas del mundo dan claves sobre que la felicidad se construye y es más fácil encontrarla cuando tenemos buenas redes sociales.
por Jennifer Abate para Suplemento Tendencias - 25/04/2010 -

1. Controlamos la mitad de nuestra felicidad. Un estudio de la U. de Edimburgo y el Instituto Queensland dice que cerca de un 50% de la felicidad está determinado por los rasgos de personalidad; por la genética. Y que la otra mitad recae directamente sobre nosotros y se relaciona con factores como las relaciones sociales, la salud y el trabajo.

2. El dinero no compra la felicidad. A menos que lo compartamos con otros, dice una investigación de EE.UU. El estudio señala que tener altos ingresos se relaciona con la felicidad, pero sólo cuando gastamos una parte de ellos en regalos o en donaciones. Incluso cuando no pasa por nosotros la decisión de gastar nuestro dinero en otros, nos sentimos felices.

3. Las relaciones sociales son clave. El amor romántico, ese que va más allá de la pasión, es crucial para sentirse satisfecho y feliz, de acuerdo con un compendio de 25 estudios. Y una investigación de la U. de Greenwich probó que los adultos mayores con fuertes relaciones de amistad se sienten hasta un 30% más felices que aquellos que sólo dependen de sus familias.

4. Un premio sólo da felicidad temporal. Tras la euforia, los que reciben de improviso cifras millonarias vuelven muy pronto a su estado inicial, ya que toma dos años acostumbrarse al cambio de vida, según descubrió el profesor Andrew Oswald, de la U. de Warwick, Inglaterra. Y Daniel Gilbert, investigador de Harvard, dice que ganarse un premio tiene muy poco impacto, pues sus efectos desaparecen alrededor de tres meses después.

5. Son las experiencias las que nos hacen felices, no las cosas. La gente que gasta su dinero en experiencias como irse de vacaciones, se siente más feliz que los que se compran un auto nuevo o arreglan la casa, dice un estudio de la U. Cornell. Esto, porque nuestra memoria guarda una fotografía emotiva de la experiencia, mientras que lo material no impacta significativamente nuestros cerebros.

lunes, 17 de mayo de 2010

EL VALOR TERAPÉUTICO DEL PERDÓN:

De acuerdo a estudios médicos contemporáneos se ha concluido que el odio y el resentimiento son una de las principales causas del cáncer.
¿Qué es el perdón?
Se habla mucho acerca del perdón, pero, en realidad, ¿Cuántas personas poseen las virtudes para perdonar? Es una decisión, una actitud, un proceso y una forma de vida. Es algo que damos a otras personas y algo que aceptamos para nosotros.
El perdón es un acto que involucra tu fuerza de voluntad con el que te das cuenta que está en tu poder desprenderte de algo que te roba energía o tranquilidad.
Edgar Cayce, cuyo trabajo de vida lo llevó a ser el llamado "místico más grande de América y padre de la medicina holistica", descubrió en un muestreo de más de mil 436 lecturas de vidas pasadas, que las razones por las que las almas más se retrasan en su evolución se relacionan con el odio y el resentimiento, es decir, por no perdonar.
De acuerdo a estudios médicos contemporáneos se ha concluido que el odio y el resentimiento son una de las principales causas del cáncer. Existe evidencia de personas que han sanado cuando han perdonado o se han perdonado así mismas.
En terapia de vidas pasadas. Terapia emocional, programación neurolinguística, y en otras terapias, el perdón es un tema obligado indispensable para sanar y evolucionar. Existe una gran variedad de formas para llegar al perdón, pero es necesario, para que funcione, que las personas se encuentre convencida de que es favorable perdonar. Es decir, no perdonar sale muy caro, energéticamente hablando.

Antídoto contra el veneno del resentimiento.
La frase "perdonar y olvidar" puede ser muy significativa. Alguien puede hacerte daño, hacerte una jugarreta o traicionarte, y eso te convierte en víctima. Sin embargo, si tú permites que ese alguien te haga lo mismo nuevamente, aparte de ser víctima te conviertes en cómplice. Piensa eso. Sí, es necesario perdonar el dolor, pero la lección deberá ser recordada, de otra forma el patrón continuará.
Existe la idea errónea de que para perdonar necesitas mantener la relación. Perdonar simplemente significa que el perdonante pueda ser amable y cooperativo. Sin embargo, es necesario hacerse el mejor amigo de esa persona o mantenerla en tu vida. El acto del perdón pone el dolor original en un contexto de sanación y se evita crear otro escenario como víctima.
La persona necesita evitar ser víctima o que la otra persona sea su víctima. Es conveniente aprender a perdonar a los demás, sin embargo, no hay control sobre el perdón de otros hacia nosotros. Eso es asunto de ellos.
Un aspecto valioso de perdonar consiste en cortar las ataduras o cadenas que conectan a personas de forma negativa. Los que no desean perdonar a otros son prisioneros de su propio odio. Ese odio se convierte en veneno. Perdonar es el antídoto… Con el tiempo todas las almas llegan a comprender que el perdón – tanto a nosotros mismos como a otros- posee cualidades indispensables para nuestra sanación.
Una vez leí: "Cuando alguien nos lastima, debemos escribirlo en la arena, donde los vientos del perdón puedan borrarlo, pero cuando alguien hace algo bueno por nosotros, debemos grabarlo en piedra donde ningún viento pueda borrarlo. Aprende a escribir tus heridas en la arena y grabar con piedra tus aventuras".

sábado, 8 de mayo de 2010

La felicidad como proyecto de vida

Por Enrique Rojas, catedrático de Psiquiatría (EL MUNDO, 15/09/07):

La felicidad consiste en ilusión. Es apasionante bucear en la historia de esta palabra. Si hacemos una excursión a lo que ella ha ido significando a lo largo del tiempo, descubrimos lo que se hospeda en su interior. Está presente en todas las lenguas románicas. Procede del latín lúdere, que significa jugar; también de ilúdere: divertirse, hacer bromas, tener ocurrencias. Hay en ellas dos una intención entre jocosa y de engaño. En el Diccionario de autoridades, del siglo XVIII, hay tres voces próximas: iluso: el que se deja engañar; ilusor: el que falsea; e ilusorio: el contenido de aquello que engaña. Como psiquiatra quiero traer a colación la voz iludere: jugar con engaño… de ahí el término ilusionista o el que hace juego de manos y divierte con sus estratagemas.
A lo largo del tiempo, esta palabra ha tenido mala prensa. De ella derivaron expresiones como hacerse ilusiones, de ilusión también se vive, es un iluso: no vive con los pies en la tierra y otras similares de efecto negativo y burlón. La primera noción positiva de esta palabra la encontramos en el Diccionario de uso del español de María Moliner (1977), en el que se recoge la idea de la esperanza de alcanzar algo especial. Pero no es hasta 1982 cuando la Real Academia de la Lengua en el Diccionario de la lengua española, nos encontramos con esta acepción: «Esperanza cuyo cumplimiento parece especialmente atractivo. Viva complacencia en una persona, cosa o tarea».
Julián Marías le dedicó un ensayo a este tema: Breve tratado de la ilusión, en el que la sitúa como aquello que mueve nuestra condición y le da un carácter proyectivo. En cualquier caso, la mirada que esta palabra nos ofrece es muy positiva enla actualidad.
La ilusión no es el contenido de la felicidad, pero sí su envoltorio. Tener ilusiones es vivir hacia delante, mirando hacia el porvenir y, en consecuencia, tener metas, retos, objetivos y planes por cumplir. Vivimos en el presente, sí, pero empapados de un futuro que se cuela dentro de nosotros y nos empuja a seguir hacia delante. Tener ilusiones es estar vivo y coleando. Como dice Don Quijote, «la felicidad no está en la posada, sino en medio del camino». Nunca puede ser entendida como un destino, un lugar a donde uno llega y se instala y se queda allí ya de por vida.
La vida da muchas vueltas. Ha visto uno caer torres muy altas. La mejor de las vidas está envuelta de sinsabores, heridas, dificultades, cosas que se han torcido y han seguido un derrotero inesperado para nosotros y nos han obligado a reconducir nuestra travesía de oro modo. Si la vida es la gran maestra, el tiempo es su gran escultor.
Los psiquiatras sabemos que los depresivos viven especialmente hacia atrás, atrapados en el pasado negativo, sin poder zambullirse de él. Las personas psicológicamente sanas viven en el presente, pero inmersas en un futuro inmediato y mediato, próximo y lejano. Ese porvenir es el tirón que empuja a seguir luchando por sacar lo mejor de uno mismo.
Hoy, para mucha gente la felicidad ha quedado reducida a tres cosas: bienestar, nivel de vida y seguridad. Cada una de ellas tiene su propio perímetro. El bienestar por sí mismo no da la felicidad: tener lo suficiente es una rampa de salida, positiva, adecuada, pero ahí no está la clave. El nivel de vida tiene un valor indudable, pero es mucha la gente que con esta premisa cubierta no es feliz. La seguridad en la existencia humana siempre es relativa y uno está a merced de los vientos exteriores que pueden cambiar las condiciones personales y un golpe negativo de fortuna le da un vuelco a la vida propia, en cuestión de horas.
¿En qué consiste entonces la felicidad? ¿Donde está la piedra filosofal para encontrar el camino adecuado? En hacer algo que merezca la pena con la propia vida, algo grande y positivo, de acuerdo con las posibilidades de cada uno. En una palabra: una vida lograda; sacarle el máximo partido estrujando sus principales argumentos.
La ilusión constituye la dimensión esencial del porvenir. Nos pasamos la vida pensando en el día de mañana. Esa es la vertiente más fértil de la existencia. Vivir es adelantarse, proyectarse, desvivirse, paladear la sinfonía de sabores que la habitan en la vida como proyecto… Trazar una cartografía de objetivos a corto y largo plazo. Pero teniendo claro que los tres grandes asuntos que atraviesan la biografía están impregnados de amor, trabajo y cultura. Esa trilogía esencial que, como un ritornello, recorre la existencia por caminos unas veces claros y otras serpenteantes, adentrándose en los entresijos de todo el ser humano. Tríptico deslizante que, como un río caudaloso, va regando las distintas parcelas de la geografía personal.
La ilusión de llegar a ser uno mismo. Tarea de artesanía, luchando a brazo partido por superar las mil y una dificultades que inevitablemente asomarán, aquí y allá, en esos avatares que irán incidiendo sobre ella. Un buen lema es: luchar por aspirar a lo excelente. Pretender lo mejor. Buscar valores que le den calidad a la vida, en medio de una sociedad como en la que estamos inmersos: repleta de avances científicos, con grandes progresos, pero que en lo humano se ha ido deteriorando de forma notarial.
Son tantas las vidas desorientadas que vemos en la actualidad, muchas vacías de verdaderos contenidos y otras perdidas. Hay pocas vidas ejemplares que sean mostradas en los medios de comunicación. Por el contrario, se ha multiplicado la exposición de vidas de famosos (no de personas con prestigio, que eso es otra cosa) siempre que estén rotas, partidas, troceadas. Pensemos en los programas basura de tantas televisiones: mucha gente toma esto como un pasatiempo, y se han multiplicado los medios para rebajar el nivel hasta puntos mínimos.
Por el contrario, la felicidad como proyecto significa tener un horizonte de metas y temas por los que uno lucha con tesón, con el alma, con la cabeza, aspirando a lo mejor
Para que el proyecto personal sea positivo debe tener las siguentes características:
1º) Que sea coherente y realista. Es decir, que haya el menor número de contradicciones posibles dentro de ella y se asiente en la realidad.
2º) Amor y trabajo conjugan el verbo ser feliz; amar el trabajo y trabajar con amor.
3º) Capacidad para superar las adversidades, derrotas y frustraciones de la vida. La existencia humana es como un tapiz, precioso por fuera, pero que cuando por curiosidad uno lo mira por detrás descubre que está lleno de zurcidos, de rotos que se han enmendado y de rajones que han sido subsanados. Por tanto, la capacidad para superar las heridas, significa buena salud mental
4º) Es conveniente tener preparado una especie de manual de emergencia para enderezar el rumbo cuando éste se ha salido de los carriles previstos. La vida es abierta y provisional. Pero tiene siempre un fondo dramático, nos puede pasar cualquier cosa y la seguridad absoluta es una moneda de escasa circulación.
5º) La amistad es una de las grandes acompañantes de la vida. Es el plato fuerte en el banquete de la existencia, pero también es siempre un riesgo, ya que dejar que los demás nos conozcan implica abrir la ciudadela interior y dejar que pasen y contemplen de cerca lo que realmente somos .
En la escala de las intensidades de los amigos, alcanzar una buena puntuación nos asegura complicidad, confidencia, intimidad, capacidad para desahogarnos en los momentos malos y buscar el apoyo y el refugio en el otro.
6º) La convivencia es un arte. La vida diaria sigue siendo la gran cuestión. Convivir es ceder, respetar al otro, pedir perdón y ser perdonado, y evitar el roce y la fricción que entorpece y desalienta. En la convivencia diaria uno se retrata; de ahí la importancia de cuidar los pequeños detalles del día a día, para hacerla amable y positiva.
El mapa de la felicidad se dibuja a base de valles y colinas, y de ríos caudalosos y de pequeños riachuelos que alimentan la tierra y le dan vigor y frescura. La felicidad consiste en sacarle el máximo jugo posible a nuestra existencia, en hacer algo que merezca la pena con la vida que uno tiene, cada uno de acuerdo con sus posibilidades y su situación.
Los perdedores, como los triunfadores, no se hacen de un día para otro, sino después de años de dejadez, abandono, desidia e indolencia, o, por el contrario, de tenacidad, de superación de las dificultades y de la capacidad para mirar siempre al horizonte que se dibuja en el porvenir.
La madurez es serenidad y benevolencia. Y tener el agradecimiento a la vuelta de la esquina para ofrecérselo a aquéllos que de una manera u otra nos han ayudado en la travesía. El agradecimiento es la memoria del corazón. Hay que aspirar a una felicidad razonable, ya que la felicidad absoluta no existe; es una quimera, una pretensión vana, una utopía, fuegos de artificio de poca duración. Y una de las puertas de entrada a ella es la coherencia personal; otra, la ilusión.

martes, 4 de mayo de 2010

La alta rentabilidad de la felicidad - Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas - 4/5/2010

16/04/2010


El jueves 15 de abril David Fischman, Vicerrector de Innovación y Desarrollo de la UPC, presentó su más reciente libro: La alta rentabilidad de la felicidad. Este trabajo publicado por el Fondo Editorial de la UPC presenta, a través de estudios científicos recientes, los beneficios y aportes de la felicidad en el desarrollo personal y profesional. Incluye también una serie de ejercicios y estrategias totalmente probadas que aumentan este sentimiento.

El libro es innovador no solo por el tema, sino por la forma en que lo aborda: sus argumentos y ejercicios se basan en la psicología positiva, una nueva disciplina académica que investiga la felicidad. Para ello, incluye historias, anécdotas, caricaturas, humor y un estilo de redacción sencillo y ameno que cautiva al lector.

Esta publicación puede ser adquirida en Libun, librerías, kioscos y autoservicios a un costo de S/ 19.90. Posteriormente, desde el 29 de abril, se pondrá a la venta el “Cuaderno de Felicidad”, un texto complementario en el que Fischman incluye una serie de ejercicios y estrategias totalmente probadas que aumentan la felicidad. El costo de este cuaderno es S/. 14.90 y se podrá encontrar en los mismos establecimientos.