Vamos a seguir con el tema de aprender a ser feliz, porque, en realidad, es toda una empresa: decidir serlo, ponerse en disposición de serlo y empezar a trabajar para serlo!
Hablabamos de la importancia de la fe, de cualquier color que sea el credo de ustedes y de la importancia de cambiar el modo de pensar y así cambiar, también, nuestras acciones.
Dijimos que nuestra mente ha sido programada y dicha programación, si es negativa, a veces hay que cambiarla y que el único modo de cambiar un mal hábito o una mala actitud, es programar de nuevo nuestra mente".
Entonces, tu fe puede ayudarte a transformar tus pensamientos negativos en positivos y llenarte de felicidad..
Como bien dijo Santa Teresa de Jesús:
Nada te turbe,
Nada te espante
Dios no se muda,
la paciencia todo lo alcanza
Quien a Dios tiene
nada le falta
Solo Dios basta.
Es muy bonito! Y tan esperanzador!
Pero, acuérdense que "A Dios rogando, pero con el mazo dando", no es cuestión de no hacer nada: pónganse manos a la obra para cambiar todo aquello que sabemos que debemos cambiar: Malas caras, malos modos, faltas de amor, etc., etc, (cada uno sabe que poner aquí!)
Cariños y sonrisas y que pasen una bella tarde
Irene
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Cariños y sonrisas