jueves, 30 de julio de 2020

TE ANIMAS A HACER AYUNO DE NOTICIAS?

Este es uno de los ejercicios más sencillos y eficaces que he podido aprender, para pasar mejor esta época. 
Cómo dice Shawn Achor, en varias de sus publicaciones, la gran mayoría de las noticias son negativas, y al estar cargadas de violencia, crímenes, robos, asesinatos, peleas, accidentes, corrupción, corrupción y más corrupción,y ahora del dichoso virus,  nos cargan inconscientemente de negatividad y hacen que pensemos que todo está mal, perdemos la fe en que las cosas pueden estar bien, perdemos la fe en la humanidad.
Te invito a hacer ese pequeño ejercicio, un ayuno de noticias, deja de verlas (o leerlas) por unos días. 
Si una noticia es realmente importante, incluso si no lees periódicos o ves televisión, lo mismo llegará a ti. 
Conozco a una persona que tenía un dolor en el brazo izquierdo, y este empezó a dormirse, de inmediato hizo una rápida búsqueda en internet, descubrió que tenía 10 enfermedades de las cuales 8 podían llevarlo a la muerte.
Por supuesto empezó a sentirse mucho peor, y ese mismo día terminó en el hospital, trasladado en ambulancia (datos verídicos), por lo que simplemente era un malestar muscular. 
La realidad no es lo que nos altera, son los lentes a través de los cuales nuestro cerebro ve el mundo lo que le da forma a nuestra realidad, es decir cómo nosotros interpretamos esa realidad
Si cambiamos los lentes y vemos la vida de forma más positiva, esto terminará dándole un sentido de mayor felicidad a nuestra existencia.
Carinos y sonrisas
Irene






lunes, 27 de julio de 2020

CANSADOS, DESMOTIVADOS, ABURRIDOS EN LA CUARENTENA?

Aburrirse durante la cuarentena: los psicólogo se preguntan si puede tener también una parte positiva?
Incluso estando en casa, muchas personas tienen un exceso de planes y compromisos, como las que hacen teletrabajo o estudian on line, pero disfrutar del placer de no hacer nada también puede tener efectos beneficiosos según los expertos
Cocinar un bizcocho, hacer manualidades, conectar por vídeollamada con tus amigos y familiares, entrenar con tu tabla de ejercicio, leer un libro, actualizar tus redes sociales... ¿no te está empezando a entrar una sensación de cierto estrés? 
Por eso, hay también quien reclama un hueco para el aburrimiento, para disfrutar del pequeño placer de no hacer nada.
Pero, partamos de que está claro que nuestra rutina ha cambiado de forma radical. “El confinamiento nos ha obligado a parar en el tiempo, nos ha llevado a vivir en unas condiciones limitadas. 
La mayoría de la población mundial ha adaptado su rutina diaria a vivir en casa, sin la posibilidad de tener contacto social o salir a disfrutar de un paseo. 
Cuando una situación se repite en el tiempo, sin tener opciones a vivir nuevas experiencias que nos generen ilusión, podemos sentir aburrimiento” (Laura Llamas, psicóloga), que nos dice que el aburrimiento es una mezcla de emociones como la desmotivación, el cansancio y el fastidio, y que generalmente surge cuando no hacemos nada o cuando lo que hacemos, no nos satisface.
“En nuestra sociedad, aburrirse significa que no tienes nada que hacer. Está mal visto ser una persona poco productiva. Tener tiempo y dedicarlo a ti mismo”. 
Y estamos, precisamente en una situación en la que podemos ver cómo nos llegan continuamente mensajes y noticias de actividades que hacer en casa, “llegando a colapsar nuestra mente”.
Por todo esto, tener tiempo es el mejor regalo que nos puede dar la vida, y aburrirse, en opinión de esta psicóloga, puede aportarnos incluso grandes beneficios:
1. Permite descansar cuerpo y mente. 
Si podemos parar, nuestro cuerpo registra una menor actividad interna y puede recargar la energía para empezar alguna otra cosa.
2. Ayuda a reflexionar y a conocernos a nosotros mismos. 
Es un momento para desconectar con el exterior y conectar con nuestro interior.
3. Permite soñar y fantasear con futuros proyectos. 
Algunas personas pueden sentir que sus futuros proyectos se han paralizado, pero este tiempo puede ser un buen momento para planificar qué pasos vamos a dar cuando volvamos a la normalidad.
Hay que buscar el equilibrio sin estresarse
La clave es pensar que el aburrimiento no es bueno ni malo, depende del significado que le demos y del tiempo que estemos con un estado de ánimo aburrido.  
Eso sí, afrontar periodos largos sintiendo hastío o desmotivación puede llevarnos a sentirnos deprimidos, ansiosos o estresados.
¿Qué podemos hacer en las semanas que aún nos quedan de cuarentena, cuando hemos llegado ya a una fase en la que el cansancio nos va dejando una marca? 
“La recomendación principal para esta cuarentena es buscar un equilibrio entre: -- sentir aburrimiento ocasional para disfrutar los beneficios de aburrirse como la reflexión, la conexión con uno mismo y el descanso 
- buscar actividades que nos generen ilusión, que nos ayude a concentrarnos y que nos hagan sentir bien. 
La cuarentena puede ser un momento vital, que permita conocerte y disfrutar de estar contigo mismo, de reflexionar y transformar aquello que está dentro de ti”, Carinos y sonrisas
Irene




sábado, 25 de julio de 2020

RELACIÓN ENTRE FELICIDAD Y DINERO. TE SUENA?

La frase: "el dinero compra la felicidad" suena a mentira, sin embargo tiene mucho de cierto (en parte), y es que el dinero puede comprar la felicidad, si y solo si, SIRVE PARA CUBRIR mis necesidades básicas de alimentación, vivienda, transporte, etc y lo estamos viendo en este momento tan grave..
El dinero nos ayuda para poder salir de la pobreza y dar el siguiente paso: casa, auto y estudio, pero una vez hemos conseguido este nivel de ingresos, el dinero que ganemos no va a cambiar radicalmente la satisfacción y la felicidad que tenemos con la vida.
El dinero deja de comprar la felicidad, cuando pasamos ese umbral, y aumentos en la cantidad de dinero que tengo, realmente no se ven reflejados en mayores índices de satisfacción.
No estoy diciendo que te quedes estancado financieramente hablando, el interés mío y de muchas personas es que sigamos incrementando nuestra salud financiera sin límite, solo quiero que sepas que eso no va a traer más felicidad. 
El camino para conseguir ese dinero, y la forma en la que ocupas tu tiempo, tiene mucho más chance de darte mayor felicidad y satisfacción en el largo plazo.
Y pongamos un ejemplo claro: Ganarse La Lotería No Es La Solución
Estudios muestran que dos meses después de haberse ganado este premio, el nivel de felicidad y satisfacción que tenían, había desaparecido y se encontraban exactamente al mismo nivel, (aunque claro está, con mucho más dinero en sus cuentas bancarias).
“Únicamente el 10% de nuestra felicidad a largo plazo depende de causas externas, el 90% restante está en nuestro interior” 
Es clave entender que la satisfacción interior es la que nos genera mucha más felicidad en el largo plazo. 
Se han preguntado por qué una persona puede ser feliz incluso cuando le pasan cosas horribles? 
Si has visto personas con enfermedades terminales que sonríen más que los que ‘lo tenemos todo’ entenderás que lo que realmente importa es la forma a la que respondemos internamente a los estímulos externos, independientemente de la situación. 
No se trata de conformarnos con la situación que tenemos actualmente, lejos de eso. 
De lo que se trata, es que a pesar de los problemas, seamos felices, y eso si, tener una actitud positiva, de solución, de resolver situaciones, esta actitud me genera mucho menos estrés y ansiedad, y se traduce en felicidad.
Carinos y sonrisas
Irene





miércoles, 22 de julio de 2020

PELIGRO: PANDEMIA, ADOLESCENTES Y TRASTORNOS ALIMENTARIOS

Hoy les traigo un artículo que salió en El Mercurio sobre que la pandemia  puede generar o agudizar trastornos alimentarios  a cualquier edad, pero el riesgo mayor está en los adolescentes,
“el encierro exacerba problemas de autoestima, preocupación excesiva por el peso, una distorsión de la imagen corporal y disfunciones familiares, un aspecto que es muy prevalente en este tipo de trastornos”. Jaime Silva, psicólogo de la Clínica Alemana y académico de la U. del Desarrollo.
El estrés, la angustia y la ansiedad que provocan el confinamiento y el actual contexto social potencian algunos factores que alteran la relación con la comida.
El llamado a quedarse en casa ha significado, para algunas personas,
una suma de factores gatillantes para que se desencadenen trastornos de la conducta alimentaria o se agudicen en quienes ya los tenían.
Todos los desórdenes de salud mental en general se resienten en las condiciones actuales, y los trastornos de la conducta alimentaria no son la excepción”. 
El estrés, angustia y ansiedad inciden sobre qué y cómo comemos.
El fenómeno se ha repetido en otros países. En EE.UU., la Asociación Nacional de Trastornos de la Alimentación (Neda, por su sigla en inglés) registró un incremento de 78% en la cantidad de personas que se conectaban a su línea de ayuda entre marzo y mayo pasados, en comparación con el mismo período de 2019.
La gran mayoría son mujeres (83%), y más de la mitad tiene menos de 17 años que es el 
grupo más vulnerable a presentar este tipo de problemas, advierten los expertos.
Comer no por hambre sino por ansiedad, o hambre emocional, es uno de estos trastornos.
“Se observan episodios de sobreingesta de alimentos por las condiciones de confinamiento y la angustia frente a lo que está pasando”, dice Silva.
Con esto tratan, inconsciente y compulsivamente, de calmar esa sensación de inquietud, ya que el acto de comer libera neurotransmisores, como la dopamina, que hace sentir placer. Pero el asunto se vuelve un círculo vicioso porque esos alivios momentáneos no resuelven las causas objetivas de la angustia o ansiedad.
Algo similar ocurre con la bulimia —en donde esta sobre comida  se compensa con más actividad física, uso de laxantes o inducirse vómitos—, así como con la anorexia y problemas relacionados con una restricción alimentaria. 
“Estos trastornos suelen estar conectados a dos cosas relevantes: la sensibilidad al estrés y un cambio en las relaciones interpersonales”. Silva 
Así, personas con anorexia o bulimia pueden estar presentando cuadros más agudos, o enfrentarse a recaídas si estaban en proceso de recuperación. 
 El seguimiento y acompañamiento de quienes padecen este tipo de trastornos es fundamental para su mejoría. 
Por eso, los expertos enfatizan no suspender las terapias y buscar apoyo profesional, de la mano de la telemedicina. Asimismo, el apoyo de la familia es esencial para advertir actitudes anómalas frente a la comida, como evadir el almuerzo o la cena, racionar los alimentos o presentar cambios bruscos en el peso corporal.
Las personas con este tipo de trastornos no son fácilmente detectables en la vida cotidiana. Pero en confinamiento, donde podemos observar más tiempo, muchas de estas problemáticas pueden ser identificadas a tiempo.
Carinos y sonrisas
Irene







martes, 21 de julio de 2020

CÓMO SER (MUCHO MÁS) FELIZ, AUN EN ESTOS MOMENTOS

Hoy les voy a contar algo de mi: cuando empecé estas publicaciones, solo tenía una cosa en mente: poder ayudar a las personas a ser mucho más felices, no hay ningún interés económico.
Por qué? Porque así como tú, he estado frustrada, muchas veces insatisfecha de los resultados, sintiéndome mal porque no lograba mis objetivos.
Pero esta sensación puede hacerse más corta de lo que normalmente es. 

He aprendido mucho durante el camino de la vida y lo que más quiero es causar un cambio en todos aquellos que están pasando por situaciones complejas.
Investigué y recopilé algunos consejos qué hacen que las personas sean más felices, independientemente de su estado actual. 
Cómo ser mucho más feliz a largo plazo, esa era la cuestión!
El primer consejo ser
 una persona muy agradecida: el secreto  es dar Gracias, Gracias, Gracias: 
La gratitud trae felicidad, la ciencia lo dice. 
Hace algún tiempo se realizó un estudio entre personas a las que se les colocaba como tarea agradecer por cinco cosas todas las noches durante 21 días y anotarlas. 
Aunque sean cosas cotidianas como que el desayuno estaba más rico o recibiste la llamada de un amigo o lo que te haya hecho estar más contento en ese momento.
Al concluir el estudio se comprobó que estas personas habían incrementado su nivel de satisfacción y felicidad ante la vida.
El agradecimiento nos ayuda a relativizar, y nos permite ver que nuestra situación por mal que se encuentre, está mejor que la de muchas personas. 
De hecho el simple motivo, de que puedas leer este artículo, te hace un ser privilegiado con respecto a una gran parte de la población que: no sabe leer, no tiene luz, no tiene computador, y no tiene internet.
Te invito a que te hagas parte del reto de 21 días agradeciendo a Dios y a la vida por esas 5 buenas cosas que te sucedan. Y si te queda gustando, toma el hábito de agradecer todos y cada uno de los días de tu vida!
Aunque Tengas Los Dientes Torcidos, SonríeCuando sonreímos, inmediatamente la atmósfera cambia, se aliviana. 

Puebenlo en la casa cuando estén pasando algún momento tenso.
Yo siempre, en la calle, sonrío, y siempre que sonreía sentía que alegraba un poco a la persona que se cruzaba conmigo (puede ser mi imaginación, lo admito).
Estudios muestran que una sonrisa verdadera es tan fuerte, que incluso cuando hablamos por teléfono y estamos sonriendo, al otro lado de la línea puede sentirse nuestra expresión. 
Es importante además resaltar que la risa y la sonrisa son contagiosas y producen bienestar. 

Si no te sale natural, simplemente esfuérzate por sonreír, ya verás como luego sin necesidad de presionarte, estarás sonriendo sin problema alguno.
Además todo es más fácil con una sonrisa.
Seguiremos manana, sonrisas y carinos

Irene



domingo, 19 de julio de 2020

POEMA ESCRITO DURANTE LA EPIDEMIA DE PESTE EN 1800. K.O'MEARA

Cuando la tormenta pase
Y se amansen los caminos
y seamos sobrevivientes
de un naufragio colectivo.
Con el corazón lloroso
y el destino bendecido
nos sentiremos dichosos
tan sólo por estar vivos.

Y le daremos un abrazo
al primer desconocido
y alabaremos la suerte
de conservar un amigo.

Y entonces recordaremos
todo aquello que perdimos
y de una vez aprenderemos
todo lo que no aprendimos.

Ya no tendremos envidia
pues todos habrán sufrido.
Ya no tendremos desidia
Seremos más compasivos.

Valdrá más lo que es de todos
Que lo jamás conseguido
Seremos más generosos
Y mucho más comprometidos

Entenderemos lo frágil
que significa estar vivos
Sudaremos empatía
por quien está y quien se ha ido.

Extrañaremos al viejo
que pedía un peso en el mercado,
que no supimos su nombre
y siempre estuvo a tu lado.

Y quizás el viejo pobre
era Dios disfrazado.
Nunca preguntaste el nombre
porque estabas apurado.

Y todo será un milagro
Y todo será un legado
Y se respetará la vida,
la vida que hemos ganado.

Cuando la tormenta pase
te pido Dios, apenado,
que nos devuelvas mejores,
como nos habías soñado.

sábado, 18 de julio de 2020

TIEMPOS DIFÍCILES Y BIENESTAR EN CASA

Tiempos difíciles como los que ha generado la covid-19 también es una buena oportunidad para incorporar hábitos saludables a nuestra vida diaria. 
Sentirse bien es importante, más que nunca!
Los mandatarios más ambiciosos han parado sus países, la industria ha frenado sus motores, la cultura ha bajado el telón y la población mundial aprueba un severo confinamiento. 
¿El motivo? Todos reconocemos que la prioridad es estar sanos.  En situaciones como la de ahora, podemos observar y medir cómo es nuestro bienestar y una oportunidad para aprender rutinas que hacen crecer nuestra calidad de vida. 
Algunas de las recetas neurocientíficas del bienestar (en casa) son estas:
CUIDA TU POSTURA. Nuestro cuerpo "le pone el cuerpo" a nuestros estados mentales, pero la postura de nuestro cuerpo escribe también el guion de nuestra mente. 
Diversos grupos de investigación observaron que, cuando nuestra postura es inclinada, encorvada o encogida, nuestra capacidad de memoria y atención es más débil, nos fijamos más en lo negativo y somatizamos más el estrés. 
Técnicas que nos pueden ayudar a dar cuenta de la postura y corregirla son las basadas en yoga, taichi o chi-kung. 
Recientes estudios científicos han mostrado que realizar estas técnicas mejora la comunicación neuronal, activa las áreas cerebrales involucradas en las emociones y la idea de nosotros mismos, y regula el sistema neuroendocrino, clave para la gestión del estrés.
Consejo: para evitar que nuestro cerebro se fije más en lo negativo y cree hábitos de miedo, se propone realizar al menos 15 minutos diarios de estiramientos o prácticas de yoga, taichi o chi-kung.
RESPIRA BIEN Y LENTO. Nuestro cerebro sabe en cada momento cómo estamos respirando, pero lo novedoso (para las neurociencias) es que esa información es utilizada por nuestras neuronas para potenciar o empobrecer nuestra atención y memoria. 
La Universidad de Chicago mostró que la respiración nasal influye en la respuesta emocional del cerebro, no así la respiración bucal. 
Hacer más lenta la respiración nos permite potenciar nuestras capacidades cognitivas y sentir el bienestar en nuestro cuerpo.
Consejo: para que nuestro cerebro no aumente la sensación de dolor, modere la respuesta emocional y potencie la atención y memoria, se propone respirar por la nariz (un truco para conseguirlo es acostumbrar a la lengua a descansar en el paladar) y realizar 10 minutos de respiración nasal lenta (seis respiraciones por minuto).
CORAZÓN CONTENTO. Recientemente se han publicado varios artículos científicos que muestran que interpretamos la realidad según sea la conversación entre nuestro cerebro y nuestro corazón, hasta el punto de influir en la percepción del dolor o como vemos una escena. 
La música del corazón hace bailar al cerebro. Pero ¿interpreta siempre la música deseable? 
Nuestro corazón escribe una sinfonía con cada pulso cardiaco, y cuanto más flexible sea (mayor variabilidad cardíaca tenga, en lenguaje científico), mayor inteligencia cognitiva y emocional tendremos. 
Lo bello es que esta sinfonía es la adecuada cuando estamos contentos, o nos divertimos, según muestra un estudio reciente. La neurociencia más vanguardista nos sugiere, por tanto, que la alegría armoniza ese baile entre el corazón y el cerebro.
Consejo: para que nuestro cerebro interprete el mundo que nos rodea de forma más saludable y siga a un corazón armonioso, se propone recrearse en las noticias alegres, buscar el lado positivo de cada situación, reírse de uno mismo y divertirse un rato cada día.
SILENCIO CEREBRAL. Uno de los artículos más célebres de la ciencia moderna dice así: una mente dispersa es una mente infeliz. 
La cantidad de recuerdos, imaginaciones y diálogos que asaltan nuestra mente es incalculable. O al menos lo era hasta hace unas décadas, cuando la Universidad de Washington midió la disipación de energía que supone estar en dicha ensoñación, sin tener control sobre la atención consciente. 
Rara vez estamos en el presente. Y es lo que debemos tratar de hacer todo el tiempo
Los beneficios de una vida "en presente" se podrían resumir en una mejora del sistema nervioso, inmune, endocrino y cardiovascular. Es decir, en todo.
Consejo: para que nuestro cerebro esté más calmado y nos sintamos más satisfechos, sea consciente de algunos de los actos que componen su día (la ducha, las sensaciones del cuerpo al estar sentado, asomarse a la ventana a aplaudir o cantar) y disfrute del silencio (prescindiendo un rato de la música, televisión o el habla).
Estamos ante una situación compleja que tiene un evidente lado dramático, aunque es también una oportunidad para adquirir hábitos saludables, para conocer y conocerse mejor, pero sobre todo para afianzar los pilares de lo que más importa: estar bien.
Carinos y sonrisas
Irene

TIENES MIEDO A SALIR DESPUÉS DE LA CUARENTENA? CLAVES PARA SUPERARLO

¿Qué significa concretamente el síndrome de la cabaña? 
Se puede definir como la aparición de miedo, ansiedad, estrés o (en casos más complejos) fobia a salir, después de pasar un periodo prolongado en un lugar seguro, cuando el panorama del exterior sigue siendo relativamente incierto.
El primer paso para lograr recomponerse del temor es reconocer el miedo, para anularlo.
“ Muchas veces las personas se obligan a sí mismas a estar tranquilas. Eso no funciona porque los temores se reprimen. Es necesario que exteriorice lo que siente”.
Por eso hay que encontrar un equilibrio entre la información positiva y negativa, para que esta última no alimente la ansiedad. 
En este caso es fundamental la fortaleza mental de cada uno.
Además hay formas de cuidarse que ya conocemos bien y si tomamos las precauciones necesarias, podemos tener un poco más de tranquilidad para salir de casa. Con una adecuada higiene y manteniendo la distancia de seguridad con otras personas es muy poco probable que podamos contagiarnos. 
Si salir te causa altos niveles de ansiedad y todavía no tienes que hacerlo, cuando llegue el momento, porque puedes permanecer en casa, pero tarde o temprano tendrás que regresar al exterior.
Los expertos coinciden en la importancia de la gradualidad. 
Es fundamental que cada quien se imponga sus límites, sin sentirse forzado. 
Al igual que tuvimos que adaptarnos poco a poco a no salir de casa, ahora debemos hacer el proceso a la inversa.
“Comienza por hacer salidas cortas o a lugares en los que se sienta seguro: un parque vecino, la casa de un amigo o familiar que viva cerca. No es que en una semana tengas que salir a hacer todo lo que no hiciste en los meses de confinamiento, tómalo con calma, sino aumentarás los estados de ansiedad”. 
“Si tienes algún familiar que te genere confianza que te acompañe en tus primeras salidas, vas a sentir un apoyo importante.(Román)
Otro consejo que da la especialista es seguir con las costumbres que adquirimos durante la cuarentena, no solo las relacionadas con la higiene y las precauciones relacionadas con el virus, para cuidar la salud, sino también los hábitos que nos hicieron sentir seguros y nos acompañaron, como las actividades artísticas y las lecturas.
Poco a poco, nos amoldaremos a la “nueva normalidad”, y eso implica entender que es necesario salir de la cabaña, pero conservando lo que aprendimos durante el confinamiento.
Las 3 claves para superar el síndrome
1. Reconoce el miedo. Negarse al estado de ansiedad que le produce saber que tiene que salir no va a servir de nada, solo le servirá para reprimirse y aumentar el estrés. 
Asuma que está preocupado, háblelo con alguien cercano o con su psicólogo.
2. Evalúa la amenaza de forma realista
Bájale al consumo de noticias negativas y concéntrate en la información comprobada
Se ha demostrado que si se toman todas las precauciones, se tiene un poco más de control sobre la situación porque realmente se evita el contagio.
3. Todo, poco a poco. La gradualidad es sumamente importante. No salgas a hacer todas las cosas de un momento a otro, ponte los límites que te hagan sentir seguro. 
En ese proceso, la familia es clave.












martes, 14 de julio de 2020

MIEDO A VOLVER A SALIR: SÍNDROME DE LA CABAñA

Tras todo este tiempo de confinamiento, cuando las medidas, se supone, van a empezar  a relajar y va a ser posible salir a la calle respetando las medidas de seguridad, algunas personas no disfrutan de la vuelta a los café y los paseos, sino que sienten miedo o rechazo a la idea de salir a la calle. 
Es lo que se conoce como el síndrome de la cabaña; que es conjunto de síntomas relacionados con la ansiedad.
Según los estudios de psicología clásicos, estas manifestaciones son habituales en gente que ha pasado mucho tiempo en situaciones de aislamiento, como plataformas petrolíferas o submarinos.
Los seres humanos tienden a crear rutinas para manejar mejor las situaciones desconocidas. Por eso, mientras que en los primeros días no poder salir a la calle producía desasosiego, ahora que la mayoría se ha acostumbrado a estar en casa, se produce el efecto contrario. 
Además, la expansión de la enfermedad ha generado una inseguridad mayor al que había antes del confinamiento y salir a la calle implica exponerse a ella. 
“El hogar es un refugio ante este marco general de incertidumbre, donde se buscan espacios que apelen a la seguridad y al control”, Laura Solana. 
Los individuos que ya contaban con una base ansiosa es más posibles que padezcan estos síntomas, ya que tienen tendencia a generar pensamientos circulares negativos, como una rotonda de pensamiento catastróficos,del cual no se puede salir y la sobreexposición a la información durante estos días contribuye a alimentar el pensamiento circular y, por tanto, a generar más ansiedad.
Se da sobre todo en aquellos que sufrían patologías previas, como la depresión, la agorafobia (miedo a los lugares abiertos) o la ansiedad social o por la salud (hipocondría). 
Y puede darse también en aquellos que han pasado el confinamiento solos y no han tenido que realizar salidas rutinarias, como acudir al centro de trabajo, pueden presentar mayores problemas al volver a la calle, porque se sienten desprotegidos.
La alerta constante que se ha recibido durante este tiempo también han exacerbado el miedo al contagio que, además, puede volver a crecer con la relajación de las medidas. 
“Ahora hay mucha gente que tiene sensación de descontrol, de que esto se nos puede ir de las manos. La percepción de los otros como un peligro es algo que todavía durará un tiempo y producirá un cambio de hábitos”, Pino. 
Para superar los temores, los expertos coinciden en que, como sucede con todos los miedos, lo mejor es enfrentarse a él. 
“En el corto plazo, permanecer en casa produce una sensación de alivio y de falsa seguridad, pero en el largo, la percepción de miedo se va instalando y las limitaciones se acrecientan”      (Solana), quien distingue entre los temores de adaptación que se van superando y los patológicos, que limitan o incapacitan. 
“No pasa nada por tener miedo, pero hay que intentar que este no te secuestre”, 
“Si empezamos a dejar de hacer cosas por el miedo, poco a poco iremos cediendo parte de nuestra vida personal y es posible que acabemos generando un cuadro de ansiedad más grave al inicial”.
La vuelta debe hacerse de manera gradual, aunque sin postergarse demasiado: empezar por reencontrarse con personas más cercanas y realizar salidas para hacer actividades gratificantes, pues esta motivación ayuda a contrarrestar el miedo. 
En este sentido, las medidas de protección previenen los contagios y tienen un efecto psicológico: “La mascarilla y los guantes sirven como una prolongación del caparazón que se tiene en casa”.
Hay que tomar todos los recaudos y vencer el miedo a salir
Cariños y sonrisas
Irene

domingo, 12 de julio de 2020

CONDUCTAS QUE LAS PERSONAS FELICES APLICAN EN SU DÍA A DÍA

Esforzarnos por mejorar nuestra actitud para ser más felices y plenos, no es tan simple como controlar la rabia mientras se maneja, por ejemplo,  pero nos sirve para hacernos una idea de que, con pequeños cambios en nuestra conducta habitual, podemos obtener grandes logros.
A continuación te voy a mostrar 3 hábitos o actitudes que la gente feliz aplica en su vida.  
¿Comenzamos?
Céntrate más en ti que en los demás. 
Este punto es uno de los más importantes que veremos en este artículo ya que no imaginas la cantidad de energía que perdemos preocupándonos constantemente por lo que piensan o puede sucederle a los demás. 
A veces lo hacemos por personas que ni siquiera son importantes para nosotros. 
Y es que, pensar en uno mismo es un deber y un derecho, tanto para nuestra felicidad como para la de los demás. 
NO ES EGOÍSMO, eso es otra cosa diferente, y olvida sentirte culpable.
Ten una actitud positiva e integradora hacia los demás. 
Pensar en uno mismo debería estar por encima de pensar en los demás, en cambio, no debemos dejar de lado el hecho de que con nuestra actitud y valores podemos ayudar a muchas personas a lo largo del camino que es la vida. 
Un pequeño gesto diario que ayude a alguien importante o no para ti, es gratificante además de aportar bondad y felicidad a otras personas. 
Te animo a que cada día hagas algo bueno por alguien. 
Es bonito creer que estamos aportando algo en este mundo.
Tu eres el responsable. 
Asumir que tenemos el control y la responsabilidad, tanto de nuestra felicidad como de nuestros éxitos y fracasos, nos permite aceptar que cada acción que tomemos tiene unas consecuencias. 
Tanto si te entristecen tus fracasos como si te alegras por tus éxitos, tuviste mucho que ver en ellos. 
Ahora debes seguir siendo responsable y centrarte en los éxitos que tuviste, no sentarte a rumiar lo que no pudiste conseguir en la vida. 
Las personas que tienen una felicidad sana asumen estas responsabilidades con una actitud positiva, asumiendo el control de su vida, e ignorando lo que otros puedan pensar de él.
Empieza ya y te sentirás mejor
Carinos y sonrisas
Irene

miércoles, 8 de julio de 2020

TORTOLITOS A LA DISTANCIA? LA SOLUCIÓN ES INTERNET:

La era de la tecnología y el internet abren un abanico de posibilidades para contactar a esa persona querida
Los ‘tortolitos’ que se encuentran separados físicamente a causa de la cuarentena pueden aprovechar este tiempo para estar consigo mismos y conocerse mejor. 
“Estos días de autoconocimiento les va a permitir mejorar la calidad de sus relaciones de pareja, ya que la falta de esa cercanía física les va a permitir darse cuenta si realmente se necesitan”. Lama.
A futuro, prosigue, el balance de este distanciamiento será positivo. 
“Comprobarán que, pese a todo, pudieron cuidar y mantener la relación con una comunicación frecuente”.
“Pero primero, deben ponerse de acuerdo en que significa para cada uno estar en una relación a distancia, que sienten y piensan con respecto a esto”, (Trinidad Forttes, psicóloga y sexóloga en @mamactiva.) 
“Lo importante es comunicarle a mi pareja, que es lo que estoy pensando y sintiendo, siendo sincero, honesto y humilde”, puntualiza en este escenario de distanciamiento.

Y si su pareja tiene miedo a la separación, al Covid, o está ansiosa,  escúchala y ayúdale a calmarse porque aunque estén físicamente separados, es posible hacer el proceso de acompañamiento desde casa.
La era de la tecnología y el internet abren un abanico de posibilidades para contactar a esa persona querida, tanto con la ‘clásica’ llamada telefónica hasta con mensajes de audio y videollamadas.
Sólo hace falta empatía y buena voluntad
Carinos y sonrisas
Irene

lunes, 6 de julio de 2020

CÓMO ANDA LA CONDUCTA DE NUESTRA PAREJA EN CUARENTENA?

Miles de enamorados, novios y esposos han modificado su forma de relacionarse con el ser amado durante esta crisis.
¿Qué cambios comunicacionales pueden darse entre ellos, ahora que deben permanecer más tiempo en el hogar y tener que compartir sus rutinas diarias? 
Es que aunque se amen ‘locamente’, esta variación radical de conducta puede fortalecer o afectar negativamente la relación.
Entre lo positivo, se destaca la posibilidad de que se escuchen más, y haya mayor empatía, respeto, confianza, aceptación, amor y romance, que aprovechen este tiempo para fortalecer su relación, disfrutar de sus compañías y del contacto físico.
“Es la oportunidad de crecer al  superar este momento de dificultad”.
Los que estaban acostumbrados a un estilo de vida laboral fuera de casa, y ahora tener que verse todo el día, ininterrumpidamente, puede resultarles difícil acostumbrarse, al punto de no respetar los espacios de trabajo del otro. 
Ver cómo el esposo se comunica con sus compañeras de trabajo, y viceversa, también puede provocar celos y peleas.
“En esta cuarentena se pueden intensificar los problemas que normalmente habían, pero que permanecían escondidos (la falta de confianza, intimidad o comunicación)” Lama.
Por eso, es muy importante tener más tolerancia
Es importante que se respeten los espacios dentro de casa, y las actividades individuales que cada uno quiera hacer, sin perder la comunicación con el otro. 
Hay que afrontar con madurez el reto del encierro sin caer en extremos ni llegar a la violencia verbal y en ningún caso física.
Aproveche estos días de confinamiento para mantener conversaciones positivas con su pareja y no se centre en lo negativo.
Comunique sus emociones con respeto y empatía. Ármese de grandes dosis de paciencia para que cuando el uno pierda la calma, el otro esté para ayudarlo, abrazarlo y perdonarlo. Busque con su pareja momentos de intimidad, aun con sus hijos en casa. 
Puede bastar una caricia, un abrazo, besos o un mimo.
Y respete los espacios que el otro necesita, ya sea para estar solo, escuchar su música favorita, leer, pintar, etc.
Carinos y sonrisas
Irene

sábado, 4 de julio de 2020

PREOCUPACIÓN, ESTRÉS, IRRITABILIDAD? LA RESPUESTA ES OPTMISMO

El estrés, la ansiedad o la irritabilidad son algunas de las consecuencias diarias de nuestro entorno, ahora en plena pandemia o en la vida cotidiana, que pueden llegar a ocasionar verdaderos estados de preocupación, angustia e incluso depresión, si no sabemos enfocarlos.
Afrontar los problemas y los cambios con optimismo es clave para no caer en  las inclemencias de nuestra existencia. Además, nuestra actitud perseverante y optimista nos ayudará a superar los baches de manera más rápida y constructiva, permitiéndonos incluso aprender de cada situación para evitar recaídas en el futuro.

De nada sirve centrarse en los puntos negativos, ya que ver sólo la parte mala de las cosas puede tener como consecuencia un bloqueo de nuestra mente que se sume a la lista de conflictos. 
Saber decir que no es tan grave, "bajar la pelota al piso", es en muchas ocasiones esencial para no pensar que somos incapaces de encontrar una solución.
Así, cuando aparezca el problema, lo primero que debemos hacer es intentar analizarlo desde la distancia, manteniendo la cabeza fría para buscar la mejor solución y afrontarlo con una actitud positiva que nos ayude a dar un cambio de perspectiva a la situación. 

De esta manera, es posible conseguir que los momentos difíciles sean más llevaderos y mejoraremos nuestro bienestar, evitando problemas de ansiedad e impotencia.
Las ventajas de ser optimistas y buscar el lado positivo de las cosas son numerosas. 

1. conseguimos mejores resultados a la hora de solucionar conflictos 
2. transmitimos serenidad y buen humor a las personas que nos rodean, que así nos responderán con buenas vibraciones creando un clima de bienestar.
Carinos y sonrisas
Irene

jueves, 2 de julio de 2020

EJERCICIOS COTIDIANOS PARA ESTAR MAS OPTIMISTA ES ESTOS MOMENTOS

El optimismo ayuda a vivir más y mejor, es por eso que debes seguir estos consejos para ser más optimista a rajatabla.
1. Escribe cada noche antes de acostarte cinco cosas buenas que te hayan pasado a lo largo del día. Pueden ser tan nimias como que hayan puesto una de tus películas favoritas en la televisión o que el café de la mañana estaba mas rico que de costumbre. 
Así te entrenarás en fijar tu atención no sólo en lo negativo. 
Es un cambio de actitud.
2. Presta atención a cómo te hablas a ti mismo. 
Que se te rompa un vaso no significa que seas un desastre, ni que te vaya mal en un examen que no sirvas para los estudios. El lenguaje es muy poderoso y la forma en que nos hablamos puede echar por tierra nuestra autoestima y, con ella, la confianza en que las cosas puedan irnos bien. 
Procura hablarte como lo harías a un amigo en vez de juzgarte como si fueras tu peor enemigo. 
"Seguir usando una y otra vez palabras llenas de negatividad no sólo no nos va a ayudar a resolver los problemas que esas mismas palabras describen, sino que, muy al contrario, lo va a hacer aún mucho más difícil",(Dr.Mario Alonso Puig, en su obra Reinvertarse).
3. Disfruta del instante
Siéntate en un banco en un jardín o da un paseo, o, en estos momentos, aunque sea asómate a la ventana, fijándote en todo tu alrededor. 
No dejes que los nervios o el enojo te impidan apreciar la caricia del sol o el rumor de la brisa que mueve las hojas de los arboles.
4. Saborea las cosas. 
Date tiempo para apreciar lo que comes, lo que lees o lo que ves. 
Disfruta del tiempo que pasas con tus amigos, familia, novio, novia. Olvida el piloto automático.
5. Haz cosas que te gusten.
Ya sea la fotografía, la danza, el ajedrez, leer o tejer, por ejemplo. 
Nadie va a darte una medalla por cargar tu día de obligaciones y, además, negarte momentos para ti hará que tus reservas de optimismo se agoten muy rápido.
6. Relaciónate. 
Llama a tus amigos, apúntate a un grupo de lectura o a un curso gratis en internet. 
No sentirnos aislados aumenta considerablemente el optimismo.
Si quieres conseguir algo, ve paso a paso. 
Organízate y ponte metas asequibles a corto plazo. 
Y felicítate por cada uno de tus logros por pequeños que sean.
7. Ayuda a los demás. 
Hacer algún tipo de voluntariado o simplemente ayudar a un vecino mayor  nos demuestra que podemos tener un impacto positivo en los demás. 
Y es que, a través de acciones pequeñas y cotidianas, es posible hacer una buena obra y sentirse mejor. 
El optimismo es contagioso. Rodearte de personas positivas te ayudará a serlo más. 
Un buen ejercicio es que analices con profundidad qué amigos o compañeros te cargan de energía negativa. 
Quédate con los que te aporten la positiva, el resto no ayuda
¿A qué esperas? Ponte en marcha hoy mismo.
Cariños y sonrisas
Irene