Que a veces nos parece que el bienestar y la felicidad es patrimonio de pocos, pero el sólo hecho de existir nos da ese derecho, pero, es una conquista propia, con esfuerzo y decisión, y que lo mismo que la autoestima, no depende del dinero, ni de la fama, sino que del juicio que nos merece la propia persona.
Y redunda en que la soledad elegida es el mejor ámbito para conocerse a sí mismo, que le parece muy positivo confrontarse con la vida, porque uno puede escapar de su realidad, pero algún día debemos enfrentarla, y tendremos que tomar el toro por los cuernos.
Es una mirada de la piel hacia adentro, para reconocer las virtudes, trabajar sobre las debilidades, y para convertirlas nuevamente en fortalezas, o que simplemente no se interpongan como piedras en nuestro camino.
Dense el tiempo, paren un ratito la vorágine de nuestras vidas, en las que perdemos lo importante en aras de lo urgente y dediquenlo a bajar de nivel, a sreenarse, a mirar hacia adentro. Esto, además de hacer bien al alma. hace bien a la salud! ( y eso lo dicen todos los médicos). No pido mucho: solo un ratito por día, 10 o 15 minutos está bien.
Hasta mañana, cariños y sonrisas
Irene
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Cariños y sonrisas