Cuando nos dimos cuenta al conectar y descargar nuestras emociones, que es lo que nos preocupa o nos mantiene alterados, debemos llevarlos a acciones concretas con fechas específicas.
Sabemos que tenemos algo por hacer, pero la tentación de dejarlo para después es grande. La resistencia a hacerlo aumenta a cada instante, y en nuestra mente arranca la racionalización de por qué nos“conviene” hacer otra cosa o no hacer nada
Lo importante es que sean acciones que te lleven a dejar de acumular y ayudarte a ti mismo a procesar las emociones día a día. Por ejemplo, hablar con la persona que estamos molesto, dejar de hacer aquello que no disfrutamos, etcétera.
Hagamos lo que tenemos que hacer y nos sentiremos mucho mas felices
Cariños y sonrisas
Irene
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Cariños y sonrisas