Para cambiar la forma en que pensamos acerca del cambio y la forma en que respondemos a él, es necesario abrir nuestra mente y corazón.
1. Aceptemos que el cambio es algo que nos puede beneficiar
La verdad es que el cambio es progreso, ya sea porque aprendimos algo o porque el resultado fue beneficioso.
De cualquier forma, cualquier cambio conlleva un beneficio.
Entre más consciente seamos de esto, más rápido nos abriremos al cambio y podremos ver las oportunidades que se “esconden" y el beneficio que nos pueden traer.
2. Aceptemos que el cambio es muy común y puede pasar en cualquier momento
Si sabemos que el cambio es muy probable, ya no nos estresaremos por cualquier cosa que se salga de nuestra planeación, estaremos preparados para actuar en cuanto veamos algo que no fue planeado o algún cambio.
3. Reduzcamos nuestras expectativas
No se trata de conformarnos con la vida, se trata de no ser inflexible.
Si planeamos cualquier cosa hasta con punto y coma, es muy probable que haya algún cambio o alguna desviación al plan.
Es decir, esta bien que tengamos una expectativa, pero no podemos pensar que solo hay un resultado y no movernos de ahí.
Ahora si establecemos expectativas razonables, por ejemplo en una relación, trabajo o cualquier otra situación, sin esperar o pedir un resultado definido, tendremos una mejor experiencia y tendremos una mejor capacidad de manejar cualquier resultado.
4. Aprendamos de la experiencia
Al hacer un cambio mental acerca del cambio y al esperar que pase, nos abrirá las puertas hacía donde podremos enfocarte en las oportunidades y sobre todo en aprender de las experiencias.
Siempre sacaremos algo bueno de todas nuestras experiencias, sin importar como se vean al principio.
Recordemos que para aprender tenemos que ser consciente de lo que estamos viviendo, así nuestra actitud en general cambiará.
5. El cambio puede transformar para bien
Cualquier cambio es para bien.
A veces lo dudamos o no estamos seguros o de plano al principio nos resistimos.
Pero cuando analizamos las situaciones pasadas, o simplemente nos damos la oportunidad de ver lo bueno que puede haber en los cambios, podremos percibir cosas realmente buenas y que pueden llevar a un cambio en nuestra vida que tal vez no nos hubieras imaginado.
6. Repitamos que somos flexible al cambio
Es necesario repetirnos que somos abiertos al cambio.
Con esto iremos cambiando la forma en que pensamos de nosotros mismos, y como pensamos acerca de los cambios.
Al aceptar el cambio, verlo como parte de un proceso de progreso, reconocer que siempre habrá cosas desconocidas y sobre todo aceptar los cambios te ayudarán a prepararte para cada cambio que pueda ocurrir en tu vida.
Afirmaciónes del día para ser más abierto al cambio
- El cambio me permite abrir los ojos hacia otros horizontes y expandir mi visión hacia cosas que antes no podía ver.
- El cambio es un recordatorio gentil de que hay cosas maravillosas esperándome.
- Mi vida se beneficia del cambio pues me permite crecer y lograr más cosas.
- Todos los cambios en mi vida son de mi propia creación.
- El impacto que tengo en este mundo es mucho más grande cuando acepto al cambio.
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