Igual que es necesario tener un filtro, también lo es atraer a buenas personas a nuestro alrededor, a personas adecuadas. La atracción de las personas a nuestra vida es muy simple, solo tenemos que ser nosotros mismos.
Una vez que mostremos quién somos en realidad, se acercarán a nosotros las personas que sintonizan con nuestra manera de ser y, por tanto, nos harán sentir bien.
Enterremos las máscaras que nos ayudan a fingir ser otro y de este modo no se acercarán a nosotros personas equivocadas.
No nos sintamos obligados a aceptar una invitación de alguien para tomar café por cortesía si esa persona nos aburre o simplemente no nos interesa.
Dejemos de ¨"vestirnos" como no nos gusta solo por encajar con otros.
Digamos lo que sentimos cómo queramos decirlo, comportémonos con los demás como sintamos hacerlo y sintamos nuestras emociones libremente.
Al hacer esto empezaremos a sentirnos libre y a apreciar la verdadera amistad, esa que aporta magia a nuestra vida.
No tengamos miedo a ser quienes somos, mostrémonos transparentes y atraeremos a amigos reales.
cariños y sonrisas
Irene
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Cariños y sonrisas