Practicar la meditación, hacer ejercicio o dormir las horas adecuadas, harán que nuestro cuerpo se sienta feliz.
Otra actividad que muchas veces no tenemos en cuenta es nuestra alimentación.
Muchas veces creemos que por comer grasas o azúcares en exceso, somos felices, pero no nos damos cuenta el daño que nos hacemos.
Consumir alimentos que nuestro cuerpo no necesita, especialmente alimentos refinados, con azúcar, ocasionan que acumule excesos en forma de grasa.
Esto endurece las arterias cerebrales y dificulta su funcionamiento.
Hábito saludable: Investiguemos cuáles son los alimentos saludables que podemos consumir.
Hagamos una dieta y reduzcamos la cantidad de azúcares que le hacen daño a nuestro cuerpo. Tomar consciencia es el primer paso para cambiar. ¡Hoy podemos empezar!
Es mucho mejor equilibrar los alimentos que ingerimos y darles la importancia que requieren. A la hora de la cena, también dejemos el celular al lado y disfrutemos de la comida junto a nuestros seres queridos.
Y otra actividad que nos hace daño es cubrirse la cabeza mientras dormimos.
Es común que las personas lo hagan para reducir los estímulos y “dormir mejor”.
Pero esto ocasiona que estemos expuestos a mayor cantidad de anhídrido carbónico, gas muy tóxico para nuestras neuronas.
Recomendación: Destapémonos, aseguremos la circulación del aire en la habitación.
Si hacemos todas estas actividades, nuestro cuerpo nos lo agradecerá y nuestra visión de la vida será más agradable
Esto endurece las arterias cerebrales y dificulta su funcionamiento.
Hábito saludable: Investiguemos cuáles son los alimentos saludables que podemos consumir.
Hagamos una dieta y reduzcamos la cantidad de azúcares que le hacen daño a nuestro cuerpo. Tomar consciencia es el primer paso para cambiar. ¡Hoy podemos empezar!
Es mucho mejor equilibrar los alimentos que ingerimos y darles la importancia que requieren. A la hora de la cena, también dejemos el celular al lado y disfrutemos de la comida junto a nuestros seres queridos.
Y otra actividad que nos hace daño es cubrirse la cabeza mientras dormimos.
Es común que las personas lo hagan para reducir los estímulos y “dormir mejor”.
Pero esto ocasiona que estemos expuestos a mayor cantidad de anhídrido carbónico, gas muy tóxico para nuestras neuronas.
Recomendación: Destapémonos, aseguremos la circulación del aire en la habitación.
Si hacemos todas estas actividades, nuestro cuerpo nos lo agradecerá y nuestra visión de la vida será más agradable
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Cariños y sonrisas