lunes, 15 de octubre de 2018

MINIMICEMOS LAS PREOCUPACIONES Y DISFRUTEMOS DE LA VIDA

1. Enfoquémonos en los pensamientos positivos. 
Cada vez que nos sintamos preocupado por algo, concentrémonos en cambiar ese pensamiento por uno positivo.
2. Disfrutemos lo que sí tenemos y agradezcamos. 

Todos tenemos razones para sentirnos bien; solo es una decisión que debemos tomar: enfocarnos en aquello que sí tenemos y no en lo que nos falta. 
Los motivos para ser agradecido son muy personales, pero podemos disfrutar y agradecer, por ejemplo, el hecho de tener un hogar, una familia…
3. Tengamos la seguridad de que cualquier problema que se presente, podremos resolverlo o superarlo. 

La preocupación muchas veces viene del miedo. 
El miedo nos hace ver cada problema más grande de lo que realmente es. 
Una clave: vernos y sentirnos nosotros mismos más grandes que el problema en cuestión. Para ello es necesario tener confianza en uno mismo y saber que no hay adversidad que no seamos capaces de superar.
Y busquemos ayuda!

Si en verdad nos sentimos tan agobiado por las preocupaciones y los problemas que no podemos ser feliz por eso, a pesar de haberlo intentado, quizás sea el momento de buscar ayuda profesional.
Cariños y sonrisas
Irene

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario.
Todo me alienta para seguir buscando y compartiendo artículos que nos hagan sentir mejor y con mayor bienestar psicológico.
Cariños y sonrisas