lunes, 30 de noviembre de 2015

COMO DESARROLLAR EL HABITO DE LA MADITACION QUE MEJORA NUESTRA CAPACIDAD DE VIVIR EN EL "AHORA"


La meditación mejora nuestra capacidad de concentración, aparte de otros muchos beneficios psicológicos Y físicos. Múltiples estudios de psicología y neurología como este (Pagnoni G., 2012), este (Jha AP et al., 2007), y tantos otros, así lo demuestran.
El cuerpo se entrena con ejercicio, y la mente también Y este es el ejercicio básico para una mente más centrada: meditar.
No hace falta ser monje y vivir en el Tíbet para disfrutar de los beneficios de la meditación. Lo que quiero decir es que los resultados se empiezan a notar pronto.

Cómo meditar (para principiantes)
Lo primero: hagámoslo simple.
Busquemos un hueco en nuestro día en el que haya silencio y nadie nos interrumpa.
Si podemos practicar cada día y hacerlo a la misma hora mejor, así creamos una rutina, la cual nos facilitará el camino para que termine convirtiéndose en un hábito:
1.- Sentémonos cómodamente.
2.- Relajemos cuerpo y mente.
3.- Concentremos nuestra atención en algo, por ejemplo, nuestra respiración.
Empecemos por 2-5 minutos y, con el tiempo, a medida que nos sintamos cómodos alarguemos nuestras sesiones progresivamente (a 10 minutos, luego a 15, a 20… y lo que queramos).
Cuando nuestra mente divague mientras meditemos, cosa que pasará (mucho!), tratemos de no juzgar esos pensamientos, están ahí, observémoslos como si fueran ajenos a nosotros. Dejemos que tal y como llegaron se vayan, sin ruido. Con suavidad, hagamos que nuestra atención regrese al estado de concentración previo a la interrupción, en este ejemplo, que nuestra concentración regrese a nuestra respiración.
Al igual que nadie empieza levantando 50 Kg en el gimnasio, nadie nace siendo Buddha, así que empieza tan simple como puedas, y poco a poco ve progresando

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario.
Todo me alienta para seguir buscando y compartiendo artículos que nos hagan sentir mejor y con mayor bienestar psicológico.
Cariños y sonrisas