«Pero por muy destructiva que sea la crítica, si no se le da importancia, no se vivirá como una ofensa».
«Asimismo, cuando seamos nosotros los que formulemos la crítica, no debemos ser apresurados a la hora de opinar, antes de formularla primero debemos dejar claro el cariño con la cual la hacemos, basarla en el respeto, y expresarla en el momento adecuado… además de ser conscientes de que el otro tiene derecho a réplica», recuerda.
Siempre, la crítica debe ser hecha a solas, no delante de todo el mundo, además de tener claro que estamos haciendo una crítica constructiva y que no enmascara un enojo o una ofensa
Cariños y sonrisas
Irene
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario.
Todo me alienta para seguir buscando y compartiendo artículos que nos hagan sentir mejor y con mayor bienestar psicológico.
Cariños y sonrisas