Hemos mencionado muchas veces lo importante que es ka actitud. Hay un dicho que dice: “Después de todo, la actitud lo es todo”.
Los hábitos de pensamiento determinan las actitudes que vamos a presentar
Y nuestro estilo de pensamiento tiene su origen en la influencia que recibimos desde el seno familiar. Durante nuestro desarrollo en este importante lugar, las diferencias de enseñanza, de valores, hábitos, usos y costumbres familiares van forjando nuestra personalidad. Toda forma de presentación ante los demás; actitud, pensamiento, postura ideológica, filosófica ante la vida, son aprendidas.
Así que quienes pregonan que “ya soy así”, “así crecí”, “soy lo que soy” y que después dicen “es imposible cambiar”, “no hay camino” y frases similares, olvidan que sus pensamientos son propios, que esa forma de pensar tuvo un origen que se encuentra en las experiencias vividas, y que nuestros actos están supeditados a dicho esquema conceptual. Por lo tanto, las decisiones con respecto a circunstancias de la vida son responsabilidad de quien las toma y las consecuencias también; es nuestro estilo de pensar, la manera en que afrontamos las adversidades que podemos cambiar cuando queramos.
Lo que diferencia a un hombre de otro, el como valora la enseñanza recibida, depende de nosotros. La felicidad interior alcanzada también. La congruencia de nuestra vida es nuestro retrato ante los demás
Ven como siempre concluímos que la felicidad depende de nostros, no lo olviden y empiecen a sentirlo, pensarlo, hacerlo carne desde hoy.
Hasta mañana, cariños y sonrisas
Irene
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Cariños y sonrisas