Uno de los principales males de nuestro mundo actual es la ansiedad. Ese estado que no nos deja respirar, que nos acelera y nos oprime el corazón, que nos da un golpe en la guata y que muchas veces, sin embargo, ni siquiera estamos seguros del todo de que es lo que lo provoca. Es como si las preocupaciones flotaran de un problema a otro, ya sean problemas familiares o relaciones interpersonales, cuestiones de trabajo, dinero, salud y podriamos seguir con la lista...
Y luego, como si ya la sensación de ansiedad no fuera suficiente, ese mismo hecho nos produce dolores de cabeza o de espalda por las contracturas en la espalda, o cansancios sin remedio o distracciones espantosas, en las que no sabemos que hemos hecho durante ese tiempo.
Pero, debemos saber que hay soluciones y que todo, como siempre, depende de nuestra disposición y en definitiva de nuestra mente. Sin embargo, cuando no podemos solos, debemos buscar ayuda en un profesional que nos oriente, en actividades físicas, en cambios de vida hacia hábitos más saludables (como disminuir la cafeina) y tantos otros consejos que siempre nos dan y que tan poco ponemos en práctica.
Bueno, no será hoy el día para empezar a tomarnos en serio y ver que es lo que realmente podemos hacer por nosotros mismos, porque vivir en este estado no es agradable (ni saludable). Hoy puede ser el gran dia (como decía una canción) para empezar a querernos y mejorar nuestra calidad de vida!
Cariños y sonrisas
Irene
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Cariños y sonrisas